Lo que hay que saber a la hora de protegerse del sol

Pasar el día en una pileta con amigos, estar al aire libre, o ir a la playa son actividades frecuentes en verano. Cuando pasamos más tiempo expuestos al sol debemos tener en cuenta cómo nos afecta la exposición solar

El riesgo de padecer algunos cánceres de piel aumenta por quemaduras frecuentes en la niñez.

En Argentina mueren más de 10 personas a la semana por causa del melanoma según las estadísticas del Ministerio de Salud de la Nación. De acuerdo a los reportes durante el año 2015 en total fallecen 550 argentinos por este tipo de cáncer de piel.

Hay que mantener ciertos cuidados y prestar especial atención a la asimetría, el color y el diámetro de los lunares, manchas, pecas y cambios en la piel o las uñas, y si hay picazón, hinchazón o molestias. Los especialistas recomiendan realizar una visita periódica al dermatólogo y tener en cuenta si hay predisposición a padecer cáncer de piel en un futuro.

Entre los factores de riesgos está la exposición solar, un historial de exposiciones crónicas o intermitentes a rayos ultravioletas, naturales o artificiales, haber tenido quemaduras solares, tener muchos lunares, ojos y/o cabello claro y antecedentes de familiares que hayan padecido melanoma. De todas maneras, cualquier persona puede desarrollar cáncer de piel.

El daño solar es acumulable y por este motivo las quemaduras solares intensas en la infancia o en la adolescencia deben ser tenidas en cuenta. Los rayos ultravioletas (UV) pueden producir un envejecimiento prematuro de la piel, lesiones precancerosas y cáncer de piel con el tiempo.

Se ha aumentado la cantidad de tiempo en que las personas se exponen al sol y hoy se suele asociar el hecho de estar bronceado a la salud y la belleza.
La disminución de la capa de ozono -que protege naturalmente de los rayos UV- los cambios de hábitos, y el aumento de la expectativa de vida son indicativos también de que hay que protegerse del sol más que antes.

Como cuidarse del sol
Utilizar protector solar con un factor de protección solar de 30 en adelante. Si permanece periodos de tiempo prolongados debe utilizar un factor 50 o 60 y consultar a su dermatólogo quien le indicará el factor correcto y cuál es la mejor opción entre las variedades que existen -spray, gel o crema- en el mercado.

Proteger el cuero cabelludo de posibles quemaduras con sombreros o gorros. Colocarse en la sombra, usar ropa fresca, de algodón, sombrillas y gafas son medidas que pueden tomarse diariamente para evitar daños ocasionados por el sol.

Renovar el protector solar cada 2 o 3 horas y aplicarlo media hora antes de exponerse al sol. Es un mito el hecho de creer que las radiaciones afectan menos cuando somos morenos o estamos bronceados, todos debemos cuidarnos de los rayos del sol.

Hay que tener en cuenta que si se quiere tomar sol se debe hacer antes de las 10 y después de las 16 horas, y que los niños menores de 6 años no deben tomar sol ni siquiera con protección ni durante el horario permitido.